• Hitzaldiak – Charlas
  • Memoria
  • Quiénes somos…

Gogoan-por una memoria digna

~ Por una memoria digna como derecho de las víctimas y de la sociedad vasca en general. Una memoria que deslegitime la violencia y que sea pedagógica para prevenir situaciones como las vividas en Euskal Herria los últimos 50 años.

Gogoan-por una memoria digna

Archivos de etiqueta: reconocimiento del daño causado

De políticas penitenciarias

05 viernes Nov 2021

Posted by gogoanmemoria in derechos humanos

≈ Deja un comentario

Etiquetas

convivencia, desarme de ETA, Diario Vasco, dispersión de presos, El Correo, Foro Social, izquierda abertzale, Joseba Azkarraga, política penitenciaria, presos de ETA, reconocimiento del daño causado, SARE, Sortu, vía Nanclares

La situación de los presos de ETA está muy presente en determinados ámbitos que se esfuerzan mucho en no dejarlos en el olvido y en denunciar la situación en la que viven que califican de injusta.

Bien, pues a propósito de los presos, hemos querido rescatar el artículo que escribió un ex preso de ETA, Joseba Urrosolo Sistiaga, en 2020 en el periódico El Diario Vasco y en El Correo donde nos ofrece un punto de vista crítico con quienes aparentemente más están haciendo por los presos.

Para los suscriptores a este medio: El Correo


“Están a otra cosa”

Hace más de 10 años que algunos presos comenzamos a dar pasos en lo que luego se conoció como Vía Nanclares. Era un marco que facilitaba la aplicación de la legalidad penitenciaria en los casos en los que había un desmarque de la actividad de ETA, un reconocimiento del daño causado y la solicitud de traslado a la cárcel de Nanclares. Todo esto estaba prohibido dentro de la política penitenciaria que la Izquierda Abertzale imponía a sus presos.

qué difícil se hacía plantear algo tan evidente como que ETA debía desaparecer, que el final de ETA debía estar acompañado de una reflexión necesariamente crítica de nuestro pasado

Después incluso de desperdiciar toda posibilidad de un final negociado o acordado, qué difícil se hacía plantear algo tan evidente como que ETA debía desaparecer, que el final de ETA debía estar acompañado de una reflexión necesariamente crítica de nuestro pasado. Qué difícil cuando los comisarios políticos salían constantemente en los medios de comunicación asegurando que era imposible que ETA desapareciera mientras hubiera presos en las cárceles. Desperdiciaron 8 años alargando gratuitamente el desarme y la desaparición de ETA. Con mucha pompa y escenificación para su parroquia y decepción para quienes esperaban algo más que ayudara a cerrar heridas y recuperar la convivencia.

Y así siguen. Como si no fueran conscientes de la difícil situación en la que les han dejado abandonados, siguen tratando de afrontar el tema de los presos desde los fuegos de artificio, mareando la perdiz, sin ir al fondo del problema. Para ello se ponen en marcha toda una serie de movidas como Sare, Foro Social… controlados por SORTU, por militantes de SORTU, cuyo único objetivo es escenificar que se dan pequeños pasos, que se hacen cositas. Parece que tiran del carro, pero tan despacito que frenan la corriente positiva que hay en la sociedad para superar los errores del pasado.

Joseba Azkarraga en nombre de SARE, frivolizaba sobre los resultados de la política de dispersión de la que él mismo fue parte. Decía que no se consiguió que los presos se alejaran de ETA, que no hubo desertores salvo unos pocos casos (…) Ni fuimos tan pocos en tantos años, ni era la dispersión sino la discrepancia la que nos alejaba de ETA, ni se puede obviar la presión social que se ejercía sobre presos y familiares, y el costo que tuvo

En un reciente escrito, Joseba Azkarraga en nombre de SARE, frivolizaba sobre los resultados de la política de dispersión de la que él mismo fue parte. Decía que no se consiguió que los presos se alejaran de ETA, que no hubo desertores salvo unos pocos casos. Todo muy épico, hasta hablar de deserción, cuando la realidad es que han tenido que hacer desaparecer a ETA, “porque les sobraba y estorbaba”, entregaron las armas a la policía y están solicitando a nivel individual un tratamiento como presos comunes.

Como para frivolizar con ese tema. Además, ni fuimos tan pocos en tantos años, ni era la dispersión sino la discrepancia la que nos alejaba de ETA, ni se puede obviar la presión social que se ejercía sobre presos y familiares, y el costo que tuvo, para evitar que el preso decidiera por sí mismo sobre los beneficios penitenciarios a los que tenía derecho.

Ahora, a los que siguen en la cárcel les dicen que ánimo, que sigan fuertes, que ya no es un deshonor solicitar el cambio de grado, ni trabajar en la cárcel, ni salir de permiso, que lo intenten, que ya no tendrán que soportar los insultos, las campañas de desprestigio y el acoso social que el entorno de la Izquierda Abertzale sometía a los que lo hacían.

Pero no les facilitan lo imprescindible. Porque, como decían los responsables del tema de presos en SORTU, “ellos están a otra cosa”. De momento, a evitar lo fundamental: la reflexión crítica y ética sobre todo el sufrimiento injusto que causamos desde el mundo de ETA. Y no solo los militantes de ETA. Algún día afrontarán esa responsabilidad, siempre demasiado tarde.

Ellos están a otra cosa. De momento, a evitar lo fundamental: la reflexión crítica y ética sobre todo el sufrimiento injusto que causamos desde el mundo de ETA. Y no solo los militantes de ETA.

Joseba Urrosolo Sistiaga, ex preso de ETA y miembro del grupo de la llamada Vía Nanclares

Sobre los deberes de la izquierda abertzale

22 domingo Mar 2020

Posted by gogoanmemoria in presos

≈ 1 comentario

Etiquetas

"Cambiar la política penitenciaria", "Están a otra cosa", "Me niego a aceptar la factura de Azkarraga", acercamiento de presos, alejamiento de presos, concentración, dispersión, Dolores González Katarain, Edurne Albizu Ormazabal, El Diario Vasco, EPPK, Ernest Lluch, ETA, Eugenio Olaziregui, Iñaki Lasagabaster, izaquierda abertzale, Joseba Azkarraga, Joseba Urrosolo Sistiaga, ponencia Oldartzen, Ramón Zallo, reconocimiento del daño causado, Red Ciudadana Sare, reinserción, socialización del sufrimiento, vía Nanclares, víctimas de ETA, Yoyes

El pasado 2 de marzo, se publicó en El Diario Vasco el artículo «Cambiar la política penitenciaria» firmado por Joseba Azkarraga, Iñaki Lasagabaster y Ramón Zallo, miembros de la Red Ciudadana SARE.

De entrada es importante diferenciar, y no seguir confundiendo, el «alejamiento vs. acercamiento», por un lado, y la «dispersión vs. concentración» por otro. En dicho artículo, además de relatar la situación injusta de alejamiento que padecen los 208 presos, realizan afirmaciones como que la dispersión fue la razón por la que se tardó en tomar la decisión de que ETA desapareciera.

La tardanza de esa disolución –en un proceso de cierre ordenado y general– se debió en buena medida a la dispersión en cárceles lejanas,

Sin embargo, esto es una simple anécdota, si continuamos con su lectura porque también cuestiona la política de dispersión: «Esa política no alcanzó sus objetivos puesto que ETA tomó la decisión de dejar la violencia 22 años después, sin que aquella defección se produjera salvo en algunos casos«, obviando el trato que dio ETA a quienes se reinsertaron o el denso trabajo que hizo la izquierda abertzale sobre quienes salían de la cárcel por esta vía.

Quizás uno de los puntos menos digerible del artículo es cuando afirman que ya se había reconocido el daño causado: «En 2013 una declaración del colectivo mayoritario de personas presas EPPK reconocía el daño causado y manifestaba su decisión de hacer uso de la legislación para normalizar su régimen carcelario.» Esta referencia al daño causado ETA la concretó más en su comunicado de 2018 cuando dijo:

A consecuencia de errores o de decisiones erróneas, ETA ha provocado también víctimas que no tenían una participación directa en el conflicto, tanto en Euskal Herria como fuera de ella. Sabemos que, obligados por las necesidades de todo tipo de la lucha armada, nuestra actuación ha perjudicado a ciudadanos y ciudadanas sin responsabilidad alguna. También hemos provocado graves daños que no tienen vuelta atrás. A estas personas y a sus familiares les pedimos perdón.

Se podría llenar el resto del post con fotografías de las otras víctimas, las que, según ETA, sí se merecieron ser asesinadas. Os dejamos un ejemplo, pero no olvidemos que hay cientos más como él:

 

A raíz del mencionado artículo, se han publicado dos a lo que queremos dar especial eco por la importancia de los colectivos a los que pertenecen sus autores -Joseba Urrosolo Sistiaga, preso disidente de ETA y miembro de la llamada Vía Nanclares, y Edurne Albizu Ormazabal, familiar de una víctima de ETA- y por el propio contenido de los mismos. Ambos son un cúmulo de verdades que difícilmente se pueden contestar.

«Están a otra cosa» de Joseba Urrosolo Sistiaga

La ponencia Oldartzen y la socialización del sufrimiento se debatieron y se apoyaron en las asambleas de la izquierda abertzale en los pueblos. Por eso es tan importante que esa responsabilidad se asuma y no se la dejen solo a los presos

«Me niego a aceptar la factura de Azkarraga» de Edurne Albizu Ormazabal

al reconocimiento le falta lo más importante: despojarse de la chulería y aceptar que todas sus víctimas han sido completamente injustas; que han asesinado a ciudadanos indefensos una y otra vez. Y que, para que así fuera, han recibido la ayuda de una parte de la sociedad que, unos  activamente y otros mirando al otro lado, han posibilitado que el terrorismo durara 50 años.

 

Recomendamos absolutamente su atenta lectura. Reflexionemos sobre las verdades que ambos nos colocan delante.

 

 

 

Política penitenciaria y convivencia

11 viernes Ene 2019

Posted by gogoanmemoria in presos

≈ Deja un comentario

Etiquetas

alejamiento, convivencia, deslegitimación de la violencia, Etxerat, Gogoan, Gogoan-por una memoria digna, Kalera, política penitenciaria, presos de ETA, reconocimiento del daño causado, reinserción, SARE, vía Nanclares, víctimas del terrorismo

Nota de prensa de Gogoan, por una memoria digna sobre política penitenciaria y convivencia

Desde Gogoan, por una memoria digna pedimos una política penitenciaria humanitaria orientada a la reinserción de los presos de ETA y pedimos pasos de estos a favor de la deslegitimación de la violencia y por el reconocimiento del daño injusto causado.

A nuestro juicio, se debería practicar una política penitenciaria humanitaria que de manera incondicional acabara con la pena añadida que supone la política de alejamiento y se debería dar un tratamiento humanitario a los presos enfermos graves adecuado a sus enfermedades, sin esperar, en ningún caso, a agravamientos irreparables de su situación.

Asimismo, consideramos un paso importante para la convivencia que estos presos reconozcan el daño causado y deslegitimen el uso de la violencia. En nuestra opinión, el modelo de la vía Nanclares constituye un ejemplo importante ya que estos presos han caminado por esta senda desde el convencimiento de que empatizar con el dolor de las víctimas, acercase a ellas, a sus vivencias es una aportación muy valiosa para la recuperación de la convivencia.

La vía Nanclares es una referencia determinante para entender la deslegitimación del uso de la violencia y, también, como camino para mejorar la convivencia. Reconocer la injusticia del daño causado, sin más matices que la cercanía a la víctimas, es un elemento central para el futuro.

En este sentido, opinamos que colectivos como Sare, Etxerat o Kalera mantienen un enfoque sesgado, que junto a reivindicaciones parciales compartibles, amparan tratar a los presos como si fueran mártires. Estas asociaciones siguen manteniendo una épica en torno a los presos, como si estos no hubieran generado un daño enorme en las víctimas, en su entorno familiar, social y político y en el conjunto de la sociedad.

Reivindicar los derechos de las 270 personas presas no implica avalar su ideario, ni mucho menos implica avalar la teoría del conflicto, que enmarca en un enfrentamiento militar lo que ha sido una agresión a la sociedad. Matar al que piensa diferente no tuvo ninguna justificación, y recibir con honores a un preso supone una doble victimización para las víctimas, porque humilla la memoria de las personas damnificadas después de tantos años de violencia.

Una apuesta coherente por la convivencia también implica una apuesta integral y completa de los derechos humanos, y sin duda el respeto a la memoria de las víctimas está entre esos derechos.

10 de enero de 2019

 

Convivencia y política penitenciaria: la experiencia de la ‘Vía Nanclares’

16 martes Oct 2018

Posted by gogoanmemoria in presos, Víctimas

≈ 1 comentario

Etiquetas

convivencia, Dirección de Víctimas del Gobierno Vasco, Encuentros Restaurativos, ETA, Gobierno Vasco, Gorka Landaburu, Joseba Urrosolo Sistiaga, KM Kulturgunea, Maixabel Lasa, presos, reconocimiento del daño causado, reinserción, vía Nanclares

Bajo este título, Maixabel Lasa -ex Directora de Víctimas del Gobierno Vasco y viuda de Juan Mari Jauregui, víctima de ETA- y Joseba Urrosolo Sistiaga -ex miembro de ETA y ex preso y uno de los impulsores de la llamada ‘vía Nanclares’- intercambiaron impresiones sobre uno de los procesos de reinserción y reconciliación más interesantes y satisfactorios que se han producido en todos estos años de violencia: la llamada ‘Vía Nanclares’ y los encuentros restaurativos entre víctimas y victimarios.

Urrosolo Sistiaga: Había dos políticas penitenciarias: la del Gobierno que cada vez se endurecía más y más; y la que marcaba la propia izquierda abertzale que nos tenía doblemente cautivos y nos impedía ejercer nuestros derechos.

Moderó Gorka Landaburu, víctima de ETA y participante de los encuentros restaurativos que hizo referencia a lo que él sintió después de aquellas reuniones:

Gorka Landaburu: Cuando terminó la sesión, salí liberado. Me di cuenta de que había sido muy positivo para mí y, sobre todo, me di cuenta de que también fue muy positivo para ellos.

Maixabel Lasa valoró la ‘vía Nanclares’ por lo que suponía de reconocer el injusto daño causado. Además, hizo una interpretación muy similar de los encuentros restaurativos. Ella conversó con Luis Carrasco, uno de los miembros del comando que asesinó a su marido.

Maixabel Lasa: Estaba destrozado. Se consideraba una mala persona. Su vida era un fracaso. Casi no me miraba. Al final, yo le tuve que recordar que sí había hecho algo positivo porque había sido valiente al pasar de ser un héroe por asesinar, a ser un traidor por arrepentirse de ello.

Aqui ofrecemos el video de las intervenciones de Joseba Urrosolo Sistiaga y de Maixabel Lasa en la KM kulturgunea de Donostia-San Sebastián.

 

Posteriormente, se permitió al público hacer algunas preguntas a los protagonistas del acto.

La sala estaba repleta. Sin duda alguna, es un tema que interesa y que realiza aportaciones positivas a la convivencia en nuestra sociedad. Desde Gogoan, procuraremos repetir debates similares en otros lugares.

Hitzaldi hau, posible egin duzuenei, benetan, milla esker.

Los presos y presas de ETA (3)

01 viernes Jun 2018

Posted by gogoanmemoria in presos, Sin categoría

≈ Deja un comentario

Etiquetas

acercamiento, acercamiento de presos y presas, Antonio Duplá, asesinatos, Asociación de Víctimas del terrorismo, AVT, Bildu, Cambó, Carmen Guisasola, comunicado de ETA, conflicto, Denon Artean-Paz y Reconciliación, Dirección de Atención a Víctimas del terrorismo del Gobierno Vasco, elkarri, Esther Pascual, ETA, extrema derecha, GAL, Gesto por la Paz, Ignacio Iturbide, izquierda abertzale, Jaime Arrese, Joseba Urrusolo Sistiaga, Ladislao Zabala, Maixabel Lasa, Parlamento Vasco, perdón, reconocimiento del daño causado, reinserción, responsabilidad, revista GALDE, terrorismo, Txema Urkijo, vía Nanclares, Víctimas, violencia

En el primero de la serie, ya explicamos nuestro apoyo al acercamiento de los presos y presas. En el segundo, recordamos el trabajo realizado por Gesto por la Paz y Denon Artean-Paz y Reconciliación en relación a la reinserción y expusimos a grandes rasgos los posicionamientos del Estado, de la izquierda abertzale, de la sociedad y de algunas organizaciones sociales como Elkarri o la AVT (Asociación de Víctimas del terrorismo).

En este tercer y último capítulo de la serie, queremos referirnos a un tema que nos parece clave para que un preso inicie un proceso de reinserción: el reconocimiento del daño causado. Recuperamos los criterios que apuntaron las dos organizaciones pacifistas y comprobamos que:

a) Desvinculación de la organización armada. Resulta necesaria una renuncia explícita a cualquier estrategia basada en el ejercicio de la violencia. Ya no hay ninguna organización de la que desvincularse, por lo que, 30 años más tarde, este paso ya no es necesario.

Eusko Lege Biltzarra-Parlamento vasco

b) Acatamiento de las reglas y principios básicos democráticos. Condición indispensable para una pesona que ha optado por defender un posicionamiento político a través de la violencia, lo que significa terminar con la vida de otros seres humanos.

En el último de ETA se decía: «ETA no tiene miedo alguno a ese escenario democrático«. Posteriormente, marcan la hoja de ruta que actualmente están siguiendo: «el principal reto será construir un proceso como pueblo que tenga como ejes la acumulación de fuerzas, la activación popular y los acuerdos entre diferentes, tanto para abordar las consecuencias del conflicto como para abordar su raíz política e histórica. Materializar el derecho a decidir para lograr el reconocimiento nacional será clave«.

c) Reconocimiento del daño causado. Y aquí está otro elemento clave que últimamente está siendo un tanto… banalizado.

En primer lugar, en el comunicado de ETA en abril: «Somos conscientes de que en este largo periodo de lucha armada hemos provocado mucho dolor, incluidos muchos daños que no tienen solución. Queremos mostrar respeto a los muertos, los heridos y las víctimas que han causado las acciones de ETA, en la medida que han resultado damnificados por el conflicto. Lo sentimos de veras (…) 

¿Se puede reconocer el daño causado sin asumir la responsabilidad de las acciones? Esto se deduce de la expresión «han resultado damnificados por el conflicto» como si el conflicto pusiera bombas o pegara tiros; en lugar de decir «han sido víctimas de la violencia de ETA».

A consecuencia de errores o de decisiones erróneas, ETA ha provocado también víctimas que no tenían una participación directa en el conflicto, tanto en Euskal Herria como fuera de ella. Sabemos que, obligados por las necesidades de todo tipo de la lucha armada, nuestra actuación ha perjudicado a ciudadanos y ciudadanas sin responsabilidad alguna. También hemos provocado graves daños que no tienen vuelta atrás. A estas personas y a sus familiares les pedimos perdón.» 

Sí, ETA pide perdón a la inmensa minoría de las víctimas que causó, pero se vuelven a esconder: «obligados por las necesidades de todo tipo de lucha armada» como si, después de 50 años de violencia, no fueran conscientes de que utilizar la violencia significa inevitablemente crear víctimas, las buscadas y las no buscadas; y, sobre todo, como si utilizar la violencia no hubiera sido una decisión tomada con absoluta libertad por cada uno de los miembros de ETA.

¿Puede un preso de ETA iniciar un proceso de reinserción sin reconocer la responsabilidad de sus acciones que fueron fruto de una decisión libremente tomada como fue ingresar en la organización terrorista y asesinar a personas? No vale es esconderse tras las siglas de la organización. Cada persona tiene que asumir la responsabilidad de sus acciones. 

Gesto por la Paz y Denon Artean, Paz y Reconciliación defendieron que el tercer criterio, el reconocimiento del daño causado, era «un principio ético general que indudablemente debe ser tenido en cuenta en sus aspectos de autocrítica hacia lo causado, tanto en su dimensión social como en la humana.»

Algo muy similar a esta propuesta lanzada hace 30 años, es el proceso que han experimentado presos de ETA como Carmen Guisasola, Joseba Urrusolo Sistiaga y el resto del grupo de la «vía Nanclares«. Este grupo participó en los encuentros restaurativos organizados por la Dirección de Atención a Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco dirigida por Maixabel Lasa, Txema Urkijo y Jaime Arrese y que contaron con la inestimable ayuda de Esther Pascual. 

Reproducimos parte de la entrevista que Antonio Duplá le hizo a Esther Pascual en la revista Galde (2015), entrevista que animamos a que sea leída:

¿Cómo alguien que ha matado, y lo ha justificado y se ha justificado a sí mismo, puede convertirse en “agente de paz”, en términos de Reyes Mate?

Pues porque hace falta mucho valor para reconocer el mal que has causado, querer asumirlo, mirar a la persona a la que has herido o arrebatado a su ser querido, mirarle a los ojos y decirle: aquí estoy, dispuesto a explicarte o aclararte lo que necesites, a escucharte y escuchar todos tus reproches,  a pedirte perdón. Alguien que hace eso, por supuesto que puede convertirse en un agente de paz, en el sentido de que puede “contagiar” a otras personas a que hagan lo mismo, de manera que se contribuya a una pacificación social. Para las víctimas es doloroso que salgan los etarras orgullosos de su pasado y de su lucha, mientras que les reconforta saber que también hay ex-terroristas que salen arrepentidos y con ganas de contribuir a la paz. Eso les convierte en agentes de paz. Y al decir arrepentido nunca me refiero a humillado. Son cosas distintas. Nelson Mandela es un gran ejemplo de todo esto.

Por desgracia, estas iniciativas tan positivas fueron bloqueadas y anuladas.

Las personas presas durante los largos años de pena que tienen por cumplir, pueden elegir entre seguir la opción de la «vía Nanclares» y optar por la reinserción o tomárselo con la calma de Bildu que, unos días más tarde del acto de Cambó, rechazó firmar una declaración institucional en el Parlamento vasco porque «hoy por hoy es imposible alcanzar un acuerdo unánime en esta materia».

Este era soméramente el contenido de la declaración:

  • Alivio compartido con la sociedad ante la desaparición de ETA
  • Compromiso inequívoco por alcanzar la verdad, justicia y reparación que reclaman las víctimas del terrorismo
  • Petición a los presos de la banda que asuman la injusticia de sus actos para acogerse a beneficios penitenciarios.
  • Apuesta por construir una memoria compartida basada en el rechazo público a cualquier tipo de violencia, su legitimación y justificación.

El camino se conoce. Es cosa de tiempo y, desde luego, la izquierda abertzale parece no tener ninguna prisa.


Estas mismas reflexiones se podían dirigir a miembros de otros grupos terroristas que actuaron en Euskal Herria, sin embargo, es muy posible que no permanezca ninguno en la cárcel, bien porque fueron juzgados hace ya muchos años y ya han cumplido las condenas o bien porque nunca fueron juzgados.

En este sentido, queremos hacer referencia a un informe de la Dirección de Atención a Víctimas del terrorismo del Gobierno Vasco encabezada por Maixabel Lasa: «se contabilizaron 74 actos terroristas de los grupos parapoliciales y de extrema derecha en el País Vasco en esa época, con un balance de 66 muertos. Los asesinatos del otro terrorismo fueron reivindicados por los GAL (24), Batallón Vasco Español (18), la Triple A (8), Grupos Antiterroristas Españoles (6) y otros. Sólo en 17 casos se llegó a una sentencia firme. El resto jamás se aclaró.» (El País, 21 de marzo de 2010) Esto es, solo se esclarecieron el 23% de los casos.


 

Los presos y presas de ETA (2)

28 lunes May 2018

Posted by gogoanmemoria in Memoria, presos, Sin categoría

≈ 3 comentarios

Etiquetas

acercamiento, Asociación de Víctimas del terrorismo, AVT, cárcel, colectivo de presos vascos, Denon Artean-Paz y Reconciliación, dispersión, Dolores González Katarain, El Correo, El Diario Vasco, El País, elkarri, ETA, Gesto por la Paz, Herrera de la Mancha, Iñigo Urkullu, Imanol, Imanol Larzabal, Isidro Etxabe, izquierda abertzale, Josu Urrutia, La Vanguardia, presos y presas de ETA, reconocimiento del daño causado, reinserción, Uxue Barkos, Yoyes

Uxue Barkos e Iñigo Urkullu

Y retomando parte de lo que se escribió y se dijo en torno a la declaración de disolución de ETA, recordamos que el Lehendakari Iñigo Urkullu y la presidenta de Navarra Uxue Barkos pidieron al Gobierno español el acercamiento de los presos y emplazaron a estos a “desarrollar las vías legales penitenciarias sobre la base de los principios de individualización, reconocimiento de daño causado y reinserción”.

¡Refresquemos la memoria!

La reinserción: el Estado y ETA

La reinserción de pres@s siempre ha sido una cuestión muy delicada por no decir directamente polémica. Por una parte, estaba la Administración, el Estado, que a pesar de tener recogido en la Constitución ese derecho y de haberlo incorporado a la Ley Orgánica General Penitenciaria que en su preámbulo dice: ‘La finalidad fundamental que doctrina y legislación atribuyen en la actualidad a las penas y medidas de privación de libertad es la prevención especial, entendida como reeducación y reinserción social de los condenados’, salvo en momentos muy determinados, siempre ha sido reticente a propiciar el uso de este derecho.

Por otra parte, estaba ETA y la izquierda abertzale que siempre se posicionaron absolutamente en contra de que ‘sus presos’ optaran por iniciar un proceso de reinserción. Para la izquierda abertzale, la reinserción era sinónimo de traición a la causa; de ahí, que se trabajara cuanto fuera necesario para mantener la férrea unidad a la que estaba sometido el ‘colectivo de presos vascos’. Esta unidad era muy importante, mucho más que su ubicación geográfica; de hecho, mientras los presos de ETA estuvieron concentrados en la cárcel de Herrera de la Mancha y desde la izquierda abertzale se organizaban autobuses y autobuses de futuros votantes y fieles seguidores hasta… la cárcel o hasta la muerte, no había demasiadas quejas respecto a la lejanía de aquel centro penitenciario. Fue la dispersión de los presos a lo que se temía más. Y se la temía porque podía significar una activación de procesos de reinserción y, sí, la reinserción era la mayor enemiga para la izquierda abertzale dentro y fuera de las cárceles porque podría suponer el debilitamiento de la causa.

Yoyes

La prueba más cruel con la que demostraron su temor a la reinserción fue el asesinato de Dolores González Katarain, Yoyes, el 10 de septiembre de 1986: «Asesinada en Ordizia la ex dirigente ‘etarra’ ‘Yoyes’ un año después de acogerse a la reinserción» (El País). Aquella ejecución ante su hijo de tres años, significó mucho más que lo que ETA pretendía y, en nada tiempo, se organizaron manifestaciones públicas contra el terror con el que ETA pretendía someter a toda la sociedad. Como dijo un periodista de La Vanguardia:

«ETA mató con una pistola a su antigua dirigente, pero erró el tiro: Yoyes, más que en un ejemplo de ETA, se convirtió en un mito contra ETA, al difundirse su pensamiento contra el «militarismo de corte fascista» en el que había caído la banda y arremeter contra los «payasos» de su entorno político que solo aplaudían atentados y más muertes. Así, Yoyes pasó a convertirse en la voz de la conciencia de una sociedad vasca que comenzó a abrir los ojos a lo que verdaderamente era ETA («la hidra sangrienta que nos atenaza», escribió) y todo empezó a cambiar en Euskadi.«

Concierto «Contra el miedo», noviembre de 1989

Aquella ejecución, no sólo creó en Yoyes un mito contra ETA; sino que también creó un mito contra el miedo personalizado en Imanol Larzabal quien, desde entonces hasta su muerte lejos de Euskal Herria, sufrió una persecución implacable.

30 años después de asesinar a Yoyes [¡Cuántos años perdidos y cuántas vidas arrebatadas en ese tiempo!] la situación ha cambiado de manera radical y en abril de 2016 leímos esto: «El etarra que mató a ‘Yoyes’ por reinsertarse pide ahora a los presos que sigan el ejemplo de su víctima» (El Correo). Por arte de birlibirloque, la reinserción dejara de ser maldita, para convertirse en el único camino a seguir para todo el colectivo de presos de ETA.

La reinserción y la sociedad

En 1992, Isidro Etxabe y Josu Urrutia también desafiaron a la banda y, a pesar de las amenazas de los abogados de la izquierda abertzale -‘Abogados de HB dicen a Etxabe que «ni por el forro de los cojones» le tolerarán romper ETA‘ (El País), optaron por la reinserción. Con el precedente de Yoyes, el paso que estaban dando estas dos personas se convirtió en un foco de especial interés para la sociedad vasca en general.

Es verdad que aparecieron pintadas amenazantes hacia Etxabe y Urrutia, pero también se vieron pintadas como estas:


La reinserción era un derecho de la persona presa y, a la vez, uno de los objetivos del sistema penitenciario, pero estaba absolutamente anulada por los intereses de unos y de otros. ¿Qué pensaba o hacía la sociedad al respecto?

En esta época, las organizaciones pacifistas Gesto por la Paz y Denon Artean-Paz y Reconciliación ya reflexionaban sobre la reinserción de los presos y el 28 de marzo de 1994 en una rueda de prensa ofrecieron su análisis sobre la REINSERCIÓN.

Este documento tiene que ser leído teniendo en cuenta que fue escrito hace 24 años y precisamente la avanzada edad del mismo es lo que le otorga más valor aún porque sus reflexiones fueron sabias y valientes y, hoy día, siguen teniendo la misma vigencia que cuando las hicieron públicas.

En el documento se apuntaban tres criterios para iniciar el proceso de reinserción:

a) Desvinculación de la organización armada. Resulta necesaria una renuncia explícita a cualquier estrategia basada en el ejercicio de la violencia.
b) Acatamiento de las reglas y principios básicos democráticos.
c) Reconocimiento del daño causado. Se trata de un principio ético general que indudablemente debe ser tenido en cuenta en sus aspectos de autocrítica hacia lo causado, tanto en su dimensión social como en la humana.

¿Hoy en día la mayoria de los presos de ETA cumplirían estas condiciones? Lo dejamos para más adelante, pero antes de terminar, vamos a ver qué pensaba la sociedad mientras estas dos organizaciones pacifistas lanzaban estas ‘condiciones’ sobre la reinserción.

  • En 1992, el Diario Vasco recogió un estudio realizado en Gipuzkoa sobre la opinión de la sociedad en relación a las medidas de reinserción:
    • el 33% de los entrevistados era partidario de que se cumplieran las condenas
    • el 33% era partidario de que se intentara aplicar medidas de reinserción a todos los presos
    • el 24’9% era partidario de que las medidas de reinserción solo se aplicaran a aquellas personas presas que no tenían delitos de sangre.

Aquí se puede leer el reportaje «Apoyo matizado a la reinserción y respaldo significativo al cumplimiento de las condenas«.

  • La izquierda abertzale siguió y sigue empecinada en que la alternativa al cumplimiento íntegro de las penas no tiene que ser una solución individual, sino colectiva.
  • La AVT: 
  • Y Elkarri:  ya que elkarri argumentaba que «la salida de los presos será más bien una consecuencia del acuerdo logrado» [leer noticia entera]

Continuará.

Suscribir

  • Artículos (RSS)
  • Comentarios (RSS)

Archivos

  • enero 2023
  • diciembre 2022
  • noviembre 2022
  • octubre 2022
  • septiembre 2022
  • agosto 2022
  • junio 2022
  • mayo 2022
  • abril 2022
  • marzo 2022
  • enero 2022
  • diciembre 2021
  • noviembre 2021
  • octubre 2021
  • julio 2021
  • junio 2021
  • mayo 2021
  • abril 2021
  • marzo 2021
  • febrero 2021
  • enero 2021
  • diciembre 2020
  • noviembre 2020
  • octubre 2020
  • septiembre 2020
  • agosto 2020
  • junio 2020
  • mayo 2020
  • abril 2020
  • marzo 2020
  • febrero 2020
  • enero 2020
  • diciembre 2019
  • noviembre 2019
  • octubre 2019
  • septiembre 2019
  • agosto 2019
  • julio 2019
  • junio 2019
  • mayo 2019
  • abril 2019
  • marzo 2019
  • febrero 2019
  • enero 2019
  • diciembre 2018
  • noviembre 2018
  • octubre 2018
  • septiembre 2018
  • julio 2018
  • junio 2018
  • mayo 2018
  • abril 2018
  • marzo 2018
  • febrero 2018
  • enero 2018
  • diciembre 2017
  • noviembre 2017
  • agosto 2017
  • julio 2017
  • junio 2017
  • mayo 2017
  • abril 2017
  • marzo 2017
  • febrero 2017
  • enero 2017
  • noviembre 2016
  • octubre 2016

Categorías

  • convivencia
  • derechos humanos
  • Guerra sucia
  • justicia
  • libros
  • Memoria
  • memoria, partidos políticos, víctimas inocentes, violencia injusta, víctimas injustas, Día de la Memoria
  • Pacifismo
  • Películas
  • presos
  • Reflexiones
  • Sin categoría
  • Víctimas

Meta

  • Registro
  • Acceder

Blog de WordPress.com.

  • Seguir Siguiendo
    • Gogoan-por una memoria digna
    • Únete a 31 seguidores más
    • ¿Ya tienes una cuenta de WordPress.com? Accede ahora.
    • Gogoan-por una memoria digna
    • Personalizar
    • Seguir Siguiendo
    • Regístrate
    • Acceder
    • Denunciar este contenido
    • Ver sitio web en el Lector
    • Gestionar las suscripciones
    • Contraer esta barra
 

Cargando comentarios...