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convivencia, desarme de ETA, Diario Vasco, dispersión de presos, El Correo, Foro Social, izquierda abertzale, Joseba Azkarraga, política penitenciaria, presos de ETA, reconocimiento del daño causado, SARE, Sortu, vía Nanclares
La situación de los presos de ETA está muy presente en determinados ámbitos que se esfuerzan mucho en no dejarlos en el olvido y en denunciar la situación en la que viven que califican de injusta.
Bien, pues a propósito de los presos, hemos querido rescatar el artículo que escribió un ex preso de ETA, Joseba Urrosolo Sistiaga, en 2020 en el periódico El Diario Vasco y en El Correo donde nos ofrece un punto de vista crítico con quienes aparentemente más están haciendo por los presos.
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“Están a otra cosa”
Hace más de 10 años que algunos presos comenzamos a dar pasos en lo que luego se conoció como Vía Nanclares. Era un marco que facilitaba la aplicación de la legalidad penitenciaria en los casos en los que había un desmarque de la actividad de ETA, un reconocimiento del daño causado y la solicitud de traslado a la cárcel de Nanclares. Todo esto estaba prohibido dentro de la política penitenciaria que la Izquierda Abertzale imponía a sus presos.
qué difícil se hacía plantear algo tan evidente como que ETA debía desaparecer, que el final de ETA debía estar acompañado de una reflexión necesariamente crítica de nuestro pasado
Después incluso de desperdiciar toda posibilidad de un final negociado o acordado, qué difícil se hacía plantear algo tan evidente como que ETA debía desaparecer, que el final de ETA debía estar acompañado de una reflexión necesariamente crítica de nuestro pasado. Qué difícil cuando los comisarios políticos salían constantemente en los medios de comunicación asegurando que era imposible que ETA desapareciera mientras hubiera presos en las cárceles. Desperdiciaron 8 años alargando gratuitamente el desarme y la desaparición de ETA. Con mucha pompa y escenificación para su parroquia y decepción para quienes esperaban algo más que ayudara a cerrar heridas y recuperar la convivencia.
Y así siguen. Como si no fueran conscientes de la difícil situación en la que les han dejado abandonados, siguen tratando de afrontar el tema de los presos desde los fuegos de artificio, mareando la perdiz, sin ir al fondo del problema. Para ello se ponen en marcha toda una serie de movidas como Sare, Foro Social… controlados por SORTU, por militantes de SORTU, cuyo único objetivo es escenificar que se dan pequeños pasos, que se hacen cositas. Parece que tiran del carro, pero tan despacito que frenan la corriente positiva que hay en la sociedad para superar los errores del pasado.
Joseba Azkarraga en nombre de SARE, frivolizaba sobre los resultados de la política de dispersión de la que él mismo fue parte. Decía que no se consiguió que los presos se alejaran de ETA, que no hubo desertores salvo unos pocos casos (…) Ni fuimos tan pocos en tantos años, ni era la dispersión sino la discrepancia la que nos alejaba de ETA, ni se puede obviar la presión social que se ejercía sobre presos y familiares, y el costo que tuvo
En un reciente escrito, Joseba Azkarraga en nombre de SARE, frivolizaba sobre los resultados de la política de dispersión de la que él mismo fue parte. Decía que no se consiguió que los presos se alejaran de ETA, que no hubo desertores salvo unos pocos casos. Todo muy épico, hasta hablar de deserción, cuando la realidad es que han tenido que hacer desaparecer a ETA, “porque les sobraba y estorbaba”, entregaron las armas a la policía y están solicitando a nivel individual un tratamiento como presos comunes.
Como para frivolizar con ese tema. Además, ni fuimos tan pocos en tantos años, ni era la dispersión sino la discrepancia la que nos alejaba de ETA, ni se puede obviar la presión social que se ejercía sobre presos y familiares, y el costo que tuvo, para evitar que el preso decidiera por sí mismo sobre los beneficios penitenciarios a los que tenía derecho.
Ahora, a los que siguen en la cárcel les dicen que ánimo, que sigan fuertes, que ya no es un deshonor solicitar el cambio de grado, ni trabajar en la cárcel, ni salir de permiso, que lo intenten, que ya no tendrán que soportar los insultos, las campañas de desprestigio y el acoso social que el entorno de la Izquierda Abertzale sometía a los que lo hacían.
Pero no les facilitan lo imprescindible. Porque, como decían los responsables del tema de presos en SORTU, “ellos están a otra cosa”. De momento, a evitar lo fundamental: la reflexión crítica y ética sobre todo el sufrimiento injusto que causamos desde el mundo de ETA. Y no solo los militantes de ETA. Algún día afrontarán esa responsabilidad, siempre demasiado tarde.
Ellos están a otra cosa. De momento, a evitar lo fundamental: la reflexión crítica y ética sobre todo el sufrimiento injusto que causamos desde el mundo de ETA. Y no solo los militantes de ETA.
Joseba Urrosolo Sistiaga, ex preso de ETA y miembro del grupo de la llamada Vía Nanclares